En japonés, las palabras Kai y Zen significan respectivamente, acción del cambio y mejora continua. De esta forma, la metodología kaizen consiste en actuar para eliminar las ineficiencias de tu sistema productivo. Se trata de un proceso en continuo crecimiento que no se deja nunca de ejecutar.Un ejemplo aplicado a tu vida diaria podría ser el de salir diariamente a correr. Si no estás acostumbrado, el primer día correrás 5 minutos, pero después de una semana ya lo harás fácilmente durante 10 y así sucesivamente, mejorando cada día. Es decir, la metodología kaizen se basa en la mejora continua. Todos los días tiene que mejorar algo.
La metodología kaizen se basa en el compromiso dentro de todas las áreas de tu empresa. Sin él, no será posible aplicarla eficazmente. Los cambios que debes realizar pueden aplicarse a cualquier aspecto de la cadena, desde fomentar la agilidad en la salida de mercancías del almacén a optimizar las rutas o la entrega de los paquetes a los clientes.Por ello, para aplicar esta metodología correctamente, debes conocer a la perfección tu negocio para saber reconocer los errores en tu sistema de transporte y distribución para así poder optimizar los recursos de una manera eficiente.En resumen, la metodología kaizen está pensada para evolucionar tu negocio día a día, ya que esta filosofía entiende que tu contexto de negocio también puede cambiar de la misma manera. Marcas como Sony o Toyota experimentaron una auténtica revolución gracias al kaizen.La metodología kaizen adquiere su nombre del kanji japonés 改善, que significa "mejora continua".
Lo más importante es ir paso a paso, no querer cambiarlo todo desde el primer día. Así, primero deberás planificarlo y ponerlo en marcha a modo de prueba para comprobar que funciona. Para hacerlo, deberás seguir los siguientes pasos:
Lo bueno de la metodología kaizen es que no necesita de grandes inversiones en infraestructuras o tecnología, sino que trata de maximizar el proceso con el mejor uso posible de los recursos disponibles.
Una de las claves está en los empleados, ya que cuentan con la experiencia necesaria y los conocimientos de tu empresa suficientes para ayudarte a la hora de diseñar la nueva metodología y de identificar qué aspectos pueden mejorarse en en proceso logístico actual.Además, si los empleados perciben que les tienes en cuenta, aumentará su motivación y su productividad, lo que supone un beneficio añadido. Todas las opiniones cuentan. Una puesta en común de estas será suficiente para implantar en tu empresa un sistema kaizen funcional. Los buenos resultados no tardarán en manifestarse.
La aplicación de la metodología kaizen no sólo se basa en la optimización de la empresa y los empleados en un momento inmediato, sino que también busca impulsarse con herramientas organizativas que busquen siempre obtener los mejores resultados posibles. Las plataformas de gestión de flotas son un claro ejemplo de ello.El uso de herramientas de este tipo maximizará los beneficios de tu empresa a corto y largo plazo, ya que te permite ahorrar en combustible, aumentar tu productividad detectando las malas prácticas y los tiempos muertos y mejorar la calidad del servicio a tus clientes.