El proceso de almacenamiento es uno de los más importantes de toda la cadena de suministro. Una óptima gestión de tu almacén será imprescindible para mejorar la productividad de tu empresa. Para lograr este objetivo es necesario tener la capacidad de medir aquellos aspectos críticos dentro de este proceso. Conociendo los kpi de almacenamiento podrás tener información real y relevante sobre la eficiencia de tu almacén.
Los KPI (key performance indicator) son indicadores de la productividad de tu negocio. A través de ellos podrás conocer el estado de tu organización logística y tomar mejores decisiones. Sólo así podrás lograr la profesionalización que estás buscando.
La productividad es el factor clave de toda empresa logística. Un KPI de almacenamiento consiste en conocer las posibilidades que ofrece tu almacén para procesar unidades aumentará tu capacidad productiva. Por eso el espacio de tu almacén debe estar optimizado. Lo puedes lograr calculando el total de unidades que has procesado en un período determinado entre los metros cuadrados útiles de tu almacén.
No sólo el almacén en sí es parte importante del proceso de almacenamiento. El desempeño de los trabajadores implicados es también parte fundamental. Este KPI de almacenamiento resulta muy útil precisamente para conocer la eficiencia de tus trabajadores de almacén. Podrás saber qué volumen de género se ha movido por cada hora trabajada.
Resulta de vital importancia saber cómo se aprovecha el espacio en tu almacén. Podría ser que necesitaras uno más amplio, o te bastará uno de más reducido. Puede que tu almacén disponga de estanterías vacías. O que por el contrario te entre género nuevo y no tengas donde colocarlo. Conoce cuánto espacio libre sueles tener y tenlo en cuenta a la hora de hacer tus pedidos.