Te proponemos 5 criterios para que sepas cómo elegir un camión para tu flota, una decisión crítica para cualquier empresa de transporte. Saber elegir el camión ideal resulta imprescindible, tanto en grandes como en pequeñas empresas. En una empresa grande por el número de camiones que puede adquirir. En una pequeña por el gran esfuerzo que supone la compra de un camión para su tesorería.
Esta es la primera pregunta que debes hacerte. Optimiza el uso de tus camiones. Infórmate al detalle del estado de tu flota. Debes saber el kilometraje y antigüedad de cada camión y determinar su vida útil. Planifica y diseña las rutas a llevar a cabo. Ten en cuenta el tipo de carga que llevas en cada una de ellas.
Comprar un nuevo camión es una decisión que no puedes tomar a la ligera. Cada vehículo de tu flota debe ser una inversión, jamás un gasto. Debes estar seguro de que será rentable y productivo para tu empresa. Que cada céntimo que inviertas en él tendrá un retorno.
Porque el coste de un camión no es solamente su precio de compra. También es la gasolina que te va a consumir día tras día. El mantenimiento periódico que va a requerir. Incluso las reparaciones que pueda necesitar. Adquirir un nuevo camión es, por lo tanto, una decisión que debe ser argumentada y reflexionada.
Llegados a este punto… ¿Sigues convencido de que necesitas un nuevo camión?
Si tu no respuesta es NO ya habrás encontrado la utilidad a este artículo. Aun así te invito a que lo sigas leyendo. En el caso de que tu respuesta sea SI, necesitas leerlo hasta el final. Sólo así sabrás cómo tomar la decisión más rentable para tu empresa.
A la hora de comprar un camión, lo primero que debes decidir es si lo comprarás nuevo o acudirás al mercado de segunda mano.
La primera opción es la de dirigirte directamente al concesionario. Allá podrás comprar un camión completamente nuevo, con todo lo que ello supone. Es un camión que a priori tendrá un funcionamiento óptimo. Su vida útil será muy larga. Se supone que tardará en necesitar reparaciones costosas. Y además debería estar actualizado a nivel tecnológico.
La segunda opción es la de buscar un camión de segunda mano. Para ello también es una buena opción acudir al concesionario. Pero además, también encontrarás multitud de negocios de compra y venta de camiones usados. Incluso podrás efectuar la transacción entre particulares. El principal beneficio en este caso es el precio. Un camión de segunda mano suele tener un precio bastante inferior al de uno nuevo.
Lo que debes tener en cuenta es que no es lo mismo el precio que pagas por tu camión que el coste que te genera y te va a generar. Todo dependerá de cómo puedas amortizar cada camión. El precio de adquisición debe ser dividido entre los años de vida útil. Y además debes tener en cuenta que un camión de segunda mano no empieza de cero. Tiene ya un kilometraje, una antigüedad y un desgaste acumulado.
Entonces… ¿qué debes comprar?
No hay una respuesta absoluta. Lo que debes hacer es evaluar tus necesidades. Comparar los precios de un camión nuevo y otro de segunda mano y ponerlos en contexto. Calcular cuánto te costará amortizar el camión en cada caso. Y a partir de ahí tomar la decisión que más pueda beneficiar a tu empresa.
Comprar un camión nuevo puede parecer algo sencillo. Todos los camiones funcionan bien cuando acaban de salir de fábrica. Entonces, ¿para qué perder tiempo con eso? Puedes ir al concesionario de siempre, y comprar el camión que te recomiende el comercial que sea de tu confianza.
Podrías hacer eso, pero no es la opción de aquellos que buscan optimizar su empresa. Hay una serie de detalles que debes tener en cuenta a la hora de decidir qué camión nuevo comprar. Es una decisión lo suficientemente importarte como para que le dediques un tiempo.
Por eso, antes de comprar un camión nuevo…
… Lee este apartado. Cuando llevas a cabo una inversión tan importante como la que supone comprar un camión es inevitable asumir una serie de riesgos. Pero si el camión que compras es de segunda mano los riesgos se multiplican.
Como experto en el sector del transporte, seguro que detectas con cierta facilidad cuando un camión está en buen estado. Sabrás cuándo te intentan engañar y cuándo has encontrado una gran oportunidad. Aun así, hay ciertas premisas que conviene que tengas muy en cuenta cuando quieras comprar un camión de segunda mano:
La compra del camión se formaliza entregando la documentación pertinente. Estos documentos son imprescindibles para que la transacción se realice en los términos que marca la ley. En el caso de que compres un camión nuevo, no tendrás ningún problema en ese aspecto. Pero si compras uno de segundo mano, sobre todo a particulares, puede que alguno de estos documentos falle.
El documento principal de la compra de un camión es el contrato de la transacción. En él se deben identificar claramente tanto el vendedor como el comprador. Aparecerá además toda la información referente al camión, como el modelo, la marca y la matrícula. En el contrato también debe constar el precio, la forma de pago y la fecha de entrega del camión.
Si la compra es de un camión usado además debes asegurarte de que el vendedor está al día en el impuesto de circulación y en la ITV. En el caso en que se hayan realizado modificaciones importantes en el camión, éstas deben aparecer en la tarjeta técnica.
Debes pedir además el libro de mantenimiento y las facturas de las reparaciones, para constatar que haya coincidencia. Además, será necesario que obtengas un informe del vehículo de segunda mano en el Registro de Vehículo de la DGT. En ese informe aparecerán las posibles multas pendientes de pago o los embargos.
Disponer de un proceso planificado de la compra de tus camiones hará que tomes la decisión final con criterio. Comprarás el camión que mejor se adapta a tus necesidades, sea nuevo o de segunda mano Y además sacarás la mayor productividad y rentabilidad de él. Comprar un camión es una decisión crítica, dedícale el tiempo y esfuerzo necesarios.