La gestión de pedidos es uno de los factores principales de la actividad logística. Por ello resulta imprescindible medir detalladamente los procesos que la componen.
La gestión de pedidos genera una serie de costes que debes conocer y tener totalmente cuantificados. Desde la formalización del pedido hasta su entrega se suceden diversas fases. En primer lugar el pedido entra en el sistema. Después se preparará en el almacén. Por último se transportará hasta el destino final. Todas estas estas fases llevan asociadas unos costes. Si no los tienes identificados no los podrás minimizar.
Como ya sabrás, el tiempo en una empresa logística tiene un valor incalculable. La actividad suele ser frenética y cualquier posibilidad de reducir los tiempos de la gestión de pedidos debe ser tomada muy en cuenta. Será, además, la manera de garantizar la satisfacción de tus clientes, logrando ser puntual en las entregas. Mide el tiempo que transcurre en casa fase del proceso y estudia dónde y cómo puedes reducirlo.
En una empresa logística lo ideal sería que todas las entregas se completaran correctamente sin incidencias. Sin embargo, no es así. Siempre surgen imprevistos que dificultan o imposibilitan el éxito del servicio. Estas incidencias deben ser analizadas y estudiadas para evitar que se repitan en el futuro. O en el caso en que se repitan, estar preparado para solucionarlas eficientemente.
Una entrega no se puede considerar exitosa si no se realiza en el tiempo acordado. De poco servirá que el pedido llegue en óptimas condiciones. El cliente es exigente y lo quiere para ya. Es necesario que contabilices y evalúes aquellas entregas que has realizado a tiempo y las que no. Será la manera de conocer la eficiencia en el tiempo logístico de entrega de tu actividad.
Hay veces en que todo sale bien. El pedido llega en el momento preciso y sin ningún tipo de incidencia. No ha sufrido ningún daño y además toda la documentación asociada es la correcta. Estos casos de éxito también deben ser estudiados. Probablemente encontrarás patrones que coincidan y obtendrás valiosas conclusiones para próximos pedidos.
Una parte muy importante de la gestión de pedidos es la documentación. En ocasiones se da poca importancia al papeleo, se ve como algo secundario. No obstante es lo que formaliza y da valor al trabajo. Si hay un error en la factura habrá retrasos en su pago. O incluso peor, provocará el enfado de tu cliente. Si un albarán no se ha firmado puede provocar malos entendidos. Mide y analiza los casos en que la documentación no se ha realizado correctamente para mejorar este proceso.